Para tener claro qué es un mecanismo de transmisión primero vamos a explicar a qué hace referencia el término mecanismo. Entendemos como mecanismo aquel artilugio o maquinaria encargados de convertir el movimiento realizado gracias a un elemento impulsor (fuerza de entrada), como podría ser el caso de un motor, en un movimiento dirigido (fuerza de salida) al que se llama elemento conducido o dirigido.
Estos elementos suelen ir acoplados sobre ejes transmisores.
Contamos con dos tipos de mecanismos como son los mecanismos de transmisión del movimiento y los mecanismos de transformación del movimiento. Cada una de estas dos ramas tiene distintos tipos de movimientos que se engloban en movimiento circular o rotatorio, el lineal y el alternativo.
Tipos de sistemas de transmisión del movimiento
Como hemos dicho, tanto los mecanismos de transmisión del movimiento como los de transformación del movimiento cuentan con diferentes movimientos o posiciones.
Movimiento circular o rotatorio
El movimiento circular o rotatorio es el que se basa en realizar un desplazamiento en círculos y girando, como sería el caso de una rueda.
Movimiento lineal
El movimiento lineal, como su propio nombre nos indica, se trata de realizar un desplazamiento en línea recta y de forma continuada. Podemos tomar como ejemplo el trayecto de un tren.
Movimiento alternativo
En el movimiento alternativo encontramos como ejemplo el de un péndulo. El desplazamiento de este tipo de movimiento se caracteriza por realizar un trayecto de ida y vuelta, oscilando o dando bandazos, eso sí, de manera controlada, por supuesto.
Mecanismos de transmisión del movimiento
Para entrar más en profundidad sobre los mecanismos de transmisión del movimiento destacamos los dos tipos característicos que le pertenecen.
El mecanismo lineal, donde sus componentes de entrada y salida transcurren en un movimiento lineal y el mecanismo circular, donde sus elementos transcurren en movimiento circular.
De estos dos tipos en el mundo del sector podemos destacar la palanca, el sistema de poleas, el sistema de poleas con correa, el sistema de ruedas de fricción y el sistema de engranajes.Elementos que vamos a detallar a continuación.
La Palanca
La palanca se basa en un mecanismo de transmisión lineal. Formada por un elemento rígido que se ayuda de un punto de apoyo con la intención de superar una resistencia mediante una fuerza aplicada.
Sistema de poleas
El sistema de poleas, del cual puedes obtener más información siguiendo este enlace a nuestra publicación de tipos de poleas, es un mecanismo de transmisión lineal donde una rueda con una ranura se desplaza de forma circular girando alrededor de un eje donde, mediante una cuerda situada encima de la polea, ejercemos la fuerza necesaria para realizar el desplazamiento.
Sistema de poleas con correa
El sistema de poleas con correa, de donde puedes obtener más información en nuestra publicación sobre poleas y correas, se trata de dos ruedas o poleas que giran a la vez gracias al efecto de la correa sobre ellas. Se trata de un mecanismo circular.
Sistema de ruedas de fricción
Una vez más nos topamos con un sistema de transmisión circular donde las ruedas rozan entre sí de manera circular con tal de realizar el movimiento deseado.
Sistema de engranajes
Mediante un sistema de engranajes en ruedas dentadas estas transmiten un movimiento circular a las ruedas adyacentes. El tamaño de los dientes de las ruedas debe ser el mismo, aunque no así las ruedas, que varían en tamaño y cantidad de dientes según su función.
Mecanismo de transmisión mecánica de un vehículo
En general, una transmisión mecánica se define como una transmisión que está controlada de forma independiente por el motor del vehículo en lugar de por una serie de dispositivos, como los engranajes y una caja de transferencia. Este tipo de transmisión tiene una serie de ventajas con respecto a las transmisiones manuales más comunes, ya que no necesita engranar el tren motriz ni realizar ninguna otra función en la propia transmisión. A menudo se denomina cambio “paralelo” o “síncrono” porque cambia las marchas y engrana la transmisión al mismo tiempo. Un cambiador típico utiliza un motor eléctrico con un embrague o un embrague de plena potencia para cambiar de marcha, mientras que una transmisión manual convencional cambia de marcha en el lado de la transmisión del motor. El embrague actúa como fuerza reductora entre la transmisión y el motor. Este tipo de transmisión se suele utilizar en vehículos más ligeros o en coches deportivos en los que se desea un rendimiento de alta velocidad, ya que un embrague de plena potencia requiere una cantidad considerable de caballos para acoplarse.
El cambio de marchas se produce cuando el vehículo pasa de punto muerto (el coche aparcado) a una marcha alta (la marcha atrás del embrague), lo que eleva la presión del líquido de la transmisión. El fluido se expande ya que se necesita más fluido para empujar el vehículo hacia la marcha más alta, reduciendo la resistencia. A medida que el fluido cambia de dirección, la velocidad del vehículo varía junto con la velocidad del fluido. Cuando se cambia una marcha a punto muerto, el motor empieza a funcionar sin que se acople el embrague. Esto se conoce como conducción “al ralentí”, ya que no hay resistencia del embrague, lo que permite una transición suave de la aceleración al frenado.
eso me sirvio mucho
Si esta super bien
Bien explicado gracias
super
gracias
exelente
Me ayudaste demasiado me salvaste de un 0